P: Eres un joven muy informado sobre la música. ¿Cómo te informas?
R: Provengo de una familia pobre. El hecho de ver cosas y no entenderlas fue lo que procuró en mí el deseo de investigar. De que Ok, los Beatles son buenos pero ¿por qué? ¿Qué fue lo que hicieron, para que todo un mundo se rindiera ante ellos? Ese tipo de inquietudes me hizo buscar en libros, revistas, recortes de periódicos, en Internet. Tratando de informarme lo más posible, no desecho información.
Todo vale, creo que esa es una actitud de jóvenes. El mundo está puesto ahí, pero ¿por qué? ¿Qué hace que las cosas estén ahí? Desde un clásico como El Quijote, hasta algo tan opuesto como Madame Butterfly.
P: ¿Hay otros como tú?
R: Sí, pocos pero los hay, y se esta produciendo algo que no puedo comprender totalmente. La juventud esta despertando -hay muchos desperdiciándose-, pero hay muchos con deseo de aprender y todo eso creo que es parte del efecto global del acceso a Internet.
P: ¿Cuándo marcas la diferencia con relación a tus compañeros del barrio?
R: Yo estudiaba becado en un colegio, cuando me cambian de ahí a una escuela pública (el Liceo Trópico) me doy cuenta de que es totalmente diferente, en el colegio era una formación diferente, los estudiantes tenían ciertas formas de comportamiento, lugares que frecuentaban, hasta la alimentación era diferente. En la escuela pública viven de otra manera, las cosas se consiguen de otro modo. Entonces me doy cuenta que hay potencial pero faltan recursos. Comenzamos a hacer círculos literarios, proyectos educacionales, conseguimos computadoras e impartimos clases de informática a grupos con el director que es profesor de filosofía en la UASD. El mismo hecho de ver estudiantes quizás con un nivel intelectual menor pero con el potencial para ser más, hizo que yo también deseara saber más, no para sentirme superior sino para ver qué más puedo darles. El segundo circulo literario que se hizo en mi barrio lo encabezó mi director, con una idea mía y fue con jóvenes, el primero se hizo con adultos. Se repartían obras literarias, una obra la tenían que utilizar hasta cinco estudiantes; presentaban poemas y ensayos escritos por ellos, se les enseñaba informática y algo de inglés, más que un circulo literario era una especie de taller de cultura.
P: ¿Que crees que falta en los barrios para su desarrollo artístico?
R: Educación, la educación procura el arte, no una educación simple de matemáticas, sociales o biología, ese tipo de cosas aunque te sirven en el momento posteriormente no, el arte es la expresión humana de los sentimientos, de tu vida, de lo que eres.
Cuando hay educación hay arte, cuando hay verdad en lo que se enseña hay arte, en la historia hay arte, hasta en la biología hay arte.
P: Un consejo para quienes enseñan desde el arte.
R: Que primero hay que sentirlo, las cosas primero se sienten, no se hacen de un modo mecánico, tienes que tener una base, tienes que saber lo que haces y posteriormente transmitir eso a los demás.
No hago nada con pararme delante de un grupo de personas y mostrarle qué tanto yo sé, sino qué tanto ellos pueden dar de sí mismos, no hago nada con mostrarles mis conocimientos, si en ellos no radica el deseo de aprender, eso es lo primero que se tiene que despertar, si esto no esta presente no logramos nada, las cosas pasan por encima, las palabras entran por un oído y salen por el otro, y no hay cambio, debe haber una idiosincrasia en lo que se hace y en lo que se dice.
De Rafael "Cholo" Brenes
1 comentario:
Esa entrevista me tocó el corazón, la verdad...
Publicar un comentario