Una queja del concierto de los salseros borícuas

Nos escribe un lector con una queja sobre el concierto de Gilberto Santa Rosa y Víctor Manuel que creo muy válida. Estas son solo algunas de las preguntas que se hace Luís Jiménez sobre ¿Qué le cuesta a un empresario coordinar con la administración de la instalación deportiva encender a la hora de la salida doscientos metros de iluminación? ¿Qué es más costoso, pagar el consumo de energía eléctrica, alquilar una planta eléctrica para esos fines, o que se produzcan varios muertos y/o heridos en una estampida en esos doscientos metros de oscuridad? ¿Porqué cuando los espectáculos son producidos directamente por las grandes marcas comerciales tales como Presidente, Brugal, Orange etc. , estos detalles son previstos y cubiertos por esas empresas ( cuyo fuerte precisamente no es el montaje de espectáculo) y no por estos empresarios del espectáculo propiamente dicho? Si usted piensa lo mismo, o lo contrario, no deje de escribir su parecer. Aquí les dejo la carta me extraña que los cronistas de espectáculo no hayan hablado sobre todo lo que Luís nos narra en mi blog? Estimada Judith, El pasado sábado fui uno de los ocho mil y algo de espectadores que asistió a presenciar el tan esperado encuentro de salseros protagonizado por Gilberto Santa Rosa y Víctor Manuel en el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto (donde se juega basquetbol). Indudablemente que una vez iniciado el espectáculo (comenzó una hora más tarde de lo anunciado) se trató de un show digno de los grandes escenarios e indudablemente que el carisma y la profesionalidad de esos dos caballeros es incuestionable. Ahora bien, mi queja no viene en la parte artística, sino en las irresponsabilidades que comúnmente incurren los productores de espectáculos y /o monta fiestas etc. en la Rep. Dominicana: LA IMPUNTUALIDAD: El espectáculo comenzó con una hora de retraso, donde se pudo apreciar que la razón fue pura y simplemente esperar a que se llenara el auditorio, en desmedro del derecho de los que asistimos a la hora anunciada. Se sobrevendió taquilla: Los pasillos situados entre las filas de asientos estaban totalmente abarrotados de personas que vieron el show de pie. Imagínense un problema y esos pasillos llenos de personas? La Seguridad del Espectáculo: Pude observar que se mantiene la tendencia de utilizar empresas privadas para manejar la seguridad de estos eventos. En este caso me llamó mucho la atención, la gran cantidad de jóvenes entre los 18 y veinte y algo de edad uniformados desempeñando esas labores. Les pido a los lectores tomar en cuenta al leer este relato, que en ese espectáculo se vendía alcohol libremente y que por demás, la fórmula de alcohol+juventud+ música, etc. Pudiera ser el detonante de una situación inmanejable para estos jóvenes. AL SALIR TODO ESTABA APAGADO Si partimos de que la autoridad en nuestro país la ejerce la Policía Nacional o las Autoridades Militares, deberíamos analizar que luego del lio armado, no es verdad que ninguno de esos jóvenes que se están siendo utilizados por esas empresas (por mas uniformados, macana, gas pimienta etc. que vi que portaban) podrían ejercer autoridad alguna sobre hombres y mujeres adultos a fuera de sí, a menos que no sea dando palos y/o armando el lio mayor con el uso del abuso y la fuerza. Cuando los asistentes del show salimos del centro olímpico, otra vez nos encontramos con que las luces exteriores que rodean las instalaciones estaban apagadas. Les ruego a los amables lectores que hagan el ejercicio de situarse a la salida del lugar donde se realizan estos shows (me pasó también con la presentación de Los Backyardigans) a las 11 de la noche junto a otros ocho o nueve mil personas (caminando unos y manejando vehículos otros) para transitar un trayecto de algunos doscientos metros hasta la salida más próxima situada por la Ortega & Gasset totalmente a oscuras. Durante este trayecto solo hay iluminación en los alrededores de donde se realizan los espectáculos y por el frente del destacamento policial localizado en el trayecto antes descripto. PREGUNTAS: * Que le cuesta a un empresario coordinar con la administración de la instalación deportiva encender a la hora de la salida doscientos metros de iluminación? * Que es más costoso, pagar el consumo de energía eléctrica, alquilar una planta eléctrica para esos fines, o que se produzcan varios muertos y/o heridos en una estampida en esos doscientos metros de oscuridad? * Porque cuando los espectáculos son producidos directamente por las grandes marcas comerciales tales como Presidente, Brugal, Orange etc. , estos detalles son previstos y cubiertos por esas empresas ( cuyo fuerte precisamente no es el montaje de espectáculo) y no por estos empresarios del espectáculo propiamente dicho? RESPUESTAS: Pues simple y llanamente, es que a estos empresarios lo único que les interesa es que nosotros paguemos nuestro dinero. Que después se le rompa un pie, la columna, atraquen, violen, roben o maten una persona en los alrededores del estadio olímpico no es su problema. Ahora entiendo el porqué las marcas comerciales tales como Presidente, Brugal, Orange etc. se han resistido a patrocinar los eventos que montan “ciertos empresarios artísticos locales” ya que evidentemente carecen de profesionalidad y entienden que su labor termina cuando se comprueban las ganancias del espectáculo que ellos regentean. Saludos Luis R. Jiménez